Las interfaces USB RME se fabrican siguiendo criterios que garantizan una adaptación óptima al hardware, una excepcional baja latencia, un rendimiento alto y amplias posibilidades de compatibilidad. Para RME el secreto del éxito radica en ser el único fabricante que no utiliza tecnología USB de terceros, sino que emplea un Audio Core de desarrollo propio con características profesionales, cuya calidad nunca se ve comprometida.